Dos tablas de la colección del Conde de Adanero

De los cientos de lotes que salieron a la venta en la subasta que se llevó a cabo los pasados 21 y 22 de mayo en la sala Alcalá Subastas, destacaron sobre el resto el retrato de la Duquesa de Arión pintado por Zuloaga, del que ya hablé en la entrada anterior, un lienzo de Bayeu y un desnudo obra de Sorolla. 

Con una valoración menor que las anteriores, pero también de un indiscutible valor artístico, aparecía en el catálogo una pareja de tablas atribuidas a Alessandro Allori, discípulo de Bronzino, en que se representan dos escenas mitológicas: La competición de Apolo y Marsias y El juicio de Midas.

Como procedencia del lote, la casa de subastas indicaba que estos dos cuadros formaron parte de la colección Adanero, lo cual hace referencia sin duda al importante conjunto de pinturas que Gonzalo de Ulloa y Ortega-Montañés, conde de Adanero, reunió a lo largo de su vida. Dicha colección, de la que se llegó a decir que era de las "más espléndidas y cuantiosas" de su tiempo y que se componía también de numerosos tapices y una amplísima biblioteca, contaba con la presencia de autores tales como Zurbarán, el Greco, Goya, Luis de Morales, Bernardo Strozzi, Carreño de Miranda y un largo etcétera.

Gonzalo de Ulloa, soltero y sin hijos, nombró heredero a su hermano José María de Ulloa y Ortega-Montañés, marqués de Castro-Serna. A su muerte en 1905, las pinturas se repartieron entre los vástagos de éste, encontrándose aún gran número de ellas entre sus descendientes.

En la actualidad muchas obras que pertenecieron al Conde de Adanero pueden contemplarse en diferentes galerías españolas, como el Museo del Prado, que justamente acaba de adquirir Oración en el huerto de Procaccini, originariamente propiedad de Gonzalo de Ulloa; el Museo Nacional de Artes Decorativas o el Carmen Thyssen-Bornemisza.

La competición de Apolo y Marsias (Foto Alcalá Subastas)

El juicio de Midas (Foto Alcalá Subastas)

Adjudicado por 137.840 euros el retrato de la Duquesa de Arión

María de la Luz Mariátegui y Pérez de Barradas por Zuloaga (Foto Alcalá Subastas)

El retrato que Ignacio Zuloaga pintara en 1918 de María de la Luz Mariátegui y Pérez de Barradas, marquesa de Bay por derecho propio y duquesa de Arión por su matrimonio con Joaquín Fernández de Córdova y Osma, ya tiene nuevo dueño después de que el pasado miércoles fuera rematado en la madrileña sala Alcalá Subastas. El precio final que ha alcanzado la pintura, de enormes dimensiones (236,5 x 200 cms), ha sido de 137.840 euros, ligeramente superior a los 120.000 de los que partía. 

Se sabe que el lienzo estuvo colocado durante años en uno de los salones del palacio que los duques de Montellano poseían en la Castellana (Hilda Fernández de Córdova y Mariátegui, marquesa de Mirabel y condesa de Santa Isabel, casó con Manuel Falcó y Escandón, duque de Montellano), tristemente demolido en 1966. 

A pesar de no haberse hecho público quién ha puesto a la venta el cuadro, en un artículo escrito por Martín Bianchi-Tasso para ABC se especulaba con la posibilidad de que fuera la viuda o alguno de los hijos de Gonzalo Fernández de Córdova y Larios, duque Arión, el cual falleció el pasado agosto.

La Duquesa de Arión posando frente a su retrato (Foto Alcalá Subastas)

Zuloaga fue uno de los más notables pintores españoles de finales del XIX y principios del XX, destacando sobre todo sus retratos. Gracias a la enorme fama que alcanzó, gozó del aprecio de las principales figuras de la aristocracia española de su época, como los Duques de Alba y su hija Cayetana, el Duque de Montellano, la Duquesa de Fernán-Núñez, el Marqués de Amurrio o la Condesa de la Maza, a los que tuvo ocasión de inmortalizar con su pincel.

La Duquesa de Alba y la Reina de Inglaterra, ¿a quién le corresponde inclinarse?

Una de las leyendas urbanas más extendidas en nuestro país es aquella que dice que, en caso de encontrarse frente a frente Cayetana Fitz-James Stuart y Silva, duquesa de Alba, y la Reina de Inglaterra, ésta debería ceder el paso a la primera. Y la cosa no se queda sólo ahí, ya que, cuenta también la leyenda, que a Isabel II corresponde saludar con una reverencia a la simpar Cayetana. El motivo de esta supuesta preeminencia, dicen, es que la aristócrata española ostenta más títulos que la soberana británica.

La realidad es que este bulo no deja de ser una invención sin base ninguna, pues en materia de protocolo prima la calidad sobre la cantidad. Por tanto, Isabel II, como reina de 16 Estados que es, siempre irá por delante de cualquier miembro de la nobleza, por muchas dignidades que éste tenga. Esto es aplicable a todos los monarcas (por ejemplo, el Gran Duque de Luxemburgo, por ser soberano, igualmente se encuentra en un rango superior a cualquier noble), príncipes (que por ser hijos de rey también están por encima) y miembros de familias reales en general. En definitiva, todas aquellas personas que ostenten el tratamiento de majestad o alteza. 

La Duquesa de Alba en una recepción celebrada en el Pardo (Foto ¡HOLA!)

Asimismo, si la precedencia fuera una cuestión de números, en España, habida cuenta de la acumulación de títulos que existe, tendríamos un nutrido grupo de aristócratas a los que deberían hacer el plongeon la mayor parte de los reyes y príncipes europeos, lo que es un auténtico disparate. 

De todas formas, como dicen que una imagen vale más que mil palabras, nada mejor que una fotografía para desmentir la historia en cuestión. La siguiente instantánea fue tomada en 1988, cuando Isabel II visitó España, y muestra el momento en el que la Duquesa de Alba saluda a la soberana británica. Y lo hace, por supuesto, con una reverencia, como manda el protocolo:

Cena de gala en el Palacio Real durante la
visita de Isabel II a España (Foto ¡HOLA!)

La guerra familiar por los millones de la tía de Isabel Sartorius

María de la Soledad Cabeza de Vaca y Leighton (84), marquesa de Moratalla, solo necesitó un minuto y treinta y tres segundos para embolsarse 257.130 euros. La aristócrata española, hija del héroe franquista Antonio Cabeza de Vaca y Carvajal, no ganó la friolera de un cuarto de millón en la Bolsa, sino en la arena de la Poule d’Essai des Poulains de 2011, una de las carreras de caballos más prestigiosas de Francia. Como es habitual en ella, no acudió al hipódromo de Longchamp, a las afueras de París, para recoger el suculento cheque.

Lee la noticia completa en el siguiente enlace:

La guerra familiar por los millones de la tía de Isabel Sartorius

De nuevo una herencia es el centro de las disputas entre miembros de la nobleza. En este caso los enfrentados son María de la Soledad Cabeza de Vaca y Leighton, marquesa de Moratalla, y su hijo, Forester Labrouche, que ha demandado a su madre por el legado de su abuela, Olga Beatrice Leighton. 

La Marquesa de Moratalla es, a su vez, hermana del malogrado Alfonso Cabeza de Vaca y Leighton, marqués de Portago y conde de la Mejorada, fallecido en 1957 al volante de su Ferrari 335S mientras disputaba la Mille Miglia.

Forester Labrouche junto a su esposa (Foto Club des Leaders)

BOE: 14-V-2014

En el BOE del presente día han aparecido publicados los Reales Decretos mediante los que el rey don Juan Carlos, en uso de las facultades que le concede el artículo 62 de la Constitución ("corresponde al Rey (...) conceder honores y distinciones con arreglo a las leyes"), ha otorgado cuatro nuevos títulos nobiliarios a las siguientes personas:

-Marquesado de Crémenes: David Álvarez Díez. 

-Marquesado de Fuster: Valentín Fuster Carulla.

-Marquesado de Grisolía: Santiago Grisolía García. 

-Condado de Gisbert: María del Carmen Iglesias Cano.

Dos de estos títulos, el Marquesado de Crémenes y el Condado de Gisbert, son de carácter vitalicio, lo que implica que una vez fallezcan los agraciados con los mismos nadie podrá sucederles. 

En la edición digital de El Mundo podrás leer una breve semblanza sobre estos cuatro nuevos miembros de la aristocracia patria:

El Rey nombra marqueses a Fuster y al patriarca de Eulen

Con estas últimas cuatro, ya son cerca de medio centenar las dignidades nobiliarias que el Rey ha dispensado desde que accedió a la Jefatura del Estado en 1975.

Amalio de Marichalar defiende en Viena la candidatura de Numancia a patrimonio UNESCO

El presidente del Foro Soria 21, Amalio de Marichalar, Conde de Ripalda, ha defendido en el European Heritage Congress 2014 en Viena, Austria, la candidatura de Numancia para se declarada patrimonio de la humanidad de la UNESCO, como ejemplo de patrimonio histórico y sosteniblidad.Amalio de Marichalar ha tenido la oportunidad de explicar en el Congreso anual de Europa Nostra que discurre en Viena hasta mañana día 6 los trabajos en defensa de Numancia desarrollados durante estos últimos años, así como la candidatura para ser declarada patrimonio de la humanidad.

Toda la noticia a continuación:

Amalio de Marichalar defiende en Viena la candidatura de Numancia a patrimonio UNESCO

Amalio de Marichalar y Sáenz de Tejada, conde de Ripalda, ha acudido a Viena, donde ha tenido lugar el European Heritage Congress 2014, con el fin de apoyar la inclusión de Numancia en la lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO. 

No hay que olvidar que hace justo un año la Justicia daba la razón a los Marichalar, que no dudaron en enfrentarse en los tribunales a la Junta de Castilla y León y los ayuntamientos de Soria y Garray ante la intención de éstos de recalificar unos solares propiedad de la familia para permitir que se construyera sobre ellos. En estas tierras se encuentran justamente las ruinas celtíberas de Numancia, por lo que la familia del ex marido de la infanta Elena consideró la decisión un auténtico atentado contra la Historia. Álvaro, el pequeño de los hermanos, se explicaba así: "Económicamente nos vendría mejor que se construyera, pero hay valores intangibles que quiero que la gente entienda. Estas tierras son de mi familia desde hace unas 45 generaciones, están documentadas al menos desde el año 1000. Son patrimonio de la Historia”. 

El Conde de Ripalda (Foto Gorka Lejarcegi)

Manuel Gullón: «He trabajado con tres Papas, un privilegio y algo único»

¿Se fijaron el domingo pasado, durante la ceremonia de canonización de los dos Papas, en la figura que ayudaba al Rey Don Juan Carlos a bajar las escaleras? No forma parte de nuestro cuerpo diplomático, aunque sí de un cuerpo protocolario que da servicio a la Santa Sede, recibiendo y atendiendo a autoridades y jefes de Estado. Son los gentilhombres de Su Santidad y él es Manuel Gullón, conde de Tepa, uno de los dos únicos españoles que forman parte de este cuerpo.

La noticia completa en este enlace:

Manuel Gullón: «He trabajado con tres Papas, un privilegio y algo único»

Manuel Gullón y de Oñate, conde de Tepa, explica para los lectores de ABC cuál es la función que ejerce como gentilhombre de Su Santidad, el cual ocupa desde hace 28 años. Ser agraciado con este cargo, que creó Pablo VI en 1968, es el mayor honor que en la actualidad se les concede a los católicos laicos.

El Conde de Tepa, a la derecha del Rey, durante la ceremonia
de canonización de Juan XXIII y Juan Pablo II (Foto EFE)

El reloj del Conde de Campo Alegre

La sucursal suiza de la casa de subastas Christie's sacará a la venta el día 12 de este mes casi medio millar de relojes de alta gama, destacando en el catálogo diversos Patek Philippe y Rolex. Asimismo, con el número de lote 288, se podrá pujar por un reloj de bolsillo de la firma suiza Breguet que perteneció a Pedro José Joaquín de Cárdenas y Chacón, conde de Campo Alegre. Éste lo adquirió en 1847 por la suma de 3.500 francos.

Nacido en 1786 y de La Habana, Pedro José Joaquín pertenecía a una familia de la élite criolla que controlaba Cuba. En el mismo año de su nacimiento, a su padre, Nicolás de Cárdenas y Castellón, alcalde de La Habana, Carlos III le concedió el Marquesado de Prado Ameno. A Pedro José Joaquín el título se lo otorgó Isabel II, concretamente en 1846. El ser ennoblecido permitió al Conde de Campo Alegre que la Reina le nombrara senador vitalicio en 1851 en virtud del artículo 15 de la Constitución de 1845 (referido a qué españoles mayores de 30 años podían ocupar asiento en la Cámara Alta). Otros honores con los que Isabel II obsequió al Conde de Campo Alegre fueron la Gran Cruz de Carlos III y el cargo de Gentilhombre de Cámara con ejercicio. 

El reloj que será próximamente subastado (Foto Christie's)